Nuevas estaciones de metro abren oportunidades atractivas para retailers en sectores económicos medios
La extensión de la red de metro en Santiago ha destapado la necesidad de ampliar la oferta de servicios, en especial de centros comerciales, supermercados y grandes tiendas en Quilicura, El Bosque y San Bernardo.
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El último anuncio del gobierno sobre inversión en transporte público en la Región Metropolitana, que incorpora la ampliación de la línea 2 hacia el Bosque y San Bernardo, y la extensión del trazado de la línea 3, que ligará Huechuraba con Quilicura, beneficiará a más de 19 mil nuevos hogares.
Pero, de manera complementaria, las oportunidades de desarrollo de negocio aparejadas al aumento del tránsito, también se incrementarán.
Además, de concretarse el trazado de la línea 7, aún en proceso de estudio, se incluirían 152 mil hogares más, dado que el el proyecto discurriría por varias comunas de gran densidad de la ciudad desde el poniente al oriente.
No cabe duda de que la ampliación de la red de transporte trae aparejado el auge del flujo de personas en las zonas aledañas a las estaciones de metro, y atrae el interés de los desarrolladores para instalar grandes tiendas, supermercados, entidades financieras o centros médicos.
Mapcity elaboró un estudio sobre las oportunidades de negocio que se generarían en los radios de influencia de las nuevas estaciones en Quilicura, El Bosque, San Bernardo y el tramo por el que ya opera la línea 1. Para ello, ha investigado el número de centros comerciales, grandes tiendas, supermercados, farmacias, bancos, cajeros, servicios de salud, educación y servicios públicos que se localizan en la actualidad.
Con todo, se advierten necesidades para la penetración, en especial, de malls, supermercados y bancos enfocados al segmento C2.
Las opciones en la línea 3 y 2
En el proyecto de la línea 3, el análisis considera un área de 10 minutos caminando alrededor de las tres nuevas estaciones (Plaza Quilicura, Las Torres y Estación EFE), con un radio de acción de 6.900 hogares concentrados en los segmentos C2, C3 y, en menor medida, en el D.
En el perímetro próximo a estas nuevas paradas, se advierte una escasa oferta de servicios comerciales, con la presencia de un sólo mall, cuatro grandes tiendas, dos supermercados y seis bancos. En mayor medida, se localizan establecimientos educacionales, servicios de salud y farmacias.
Por tanto, junto con el previsible auge comercial del entorno y de la plusvalía de las viviendas, se descubren oportunidades para el arribo de supermercados, bancos y cajeros automáticos, entre otros.
En tanto, en las zonas aledañas a las cuatro nuevas estaciones de metro de la línea 2 (Lo Espejo, Observatorio, Lo Martínez y Hospital El Pino) se localizan 12.228 hogares, la gran mayoría habitados por el estrato socioeconómico D, seguido en menor medida del C3 y C2.
Dentro de estos barrios no se han instalado aún centros comerciales ni grandes tiendas. Sólo se localizan dos bancos y cinco supermercados.
Si bien, la oferta de salud y educativa es más abundante. En total, ahora se ubican 80 puntos de interés que podrían incrementarse con la llegada del transporte.
La línea 7, menos demandante
Por último, de acuerdo a una proyección de la línea 7, la alternativa comunicaría Maipú con Vitacura, cruzando Estación Central, Santiago y Providencia. En total, el área de acción registra una población de 510 mil habitantes de gran heterogeneidad socioeconómica.
"Su trazado pasa por zonas altamente comerciales pero, en el futuro, las zonas pueden ser potenciadas por nuevos centros comerciales y tiendas, entre otros", explica Cristián Araneda, gerente de estudios de Mapcity. Esto, ya que a pesar de que la oferta supera los 1.400 establecimientos, aún se observan opciones importantes en el sector comercial.
Las cifras que involucran los proyectos de ampliación de los nuevos trazados
La primera semana de noviembre el Gobierno anunció que invertirá US$ 4.200 millones para mejorar la infraestructura del transporte público en 14 proyectos, uno de los cuales sería el estudio de la línea 7 del Metro de Santiago. Su recorrido partiría en Avenida 5 de abril, pasando principalmente por Blanco Encalada, Santa Isabel, Andrés Bello y Vitacura.
Por su parte, la extensión de la línea 3 hacia Quilicura agregará 3,8 kilómetros. Las obras se iniciarán en 2016 y requerirá una inversión de US$ 373 millones. En tanto, las obras de la línea 2, que permitirá la conexión con El Bosque y San Bernardo, donde reside una población de 460 mil habitantes, están previstas para 2017. En el proyecto se desembolsarán US$ 800 millones.
En total, se ha estimado una inversión de US$ 1.173 millones a los que se agregan US$ 317 millones que se emplearán para aumentar la capacidad de la red actual del metro, con al menos 12 nuevos trenes.
Dentro de la Región Metropolitana se reforzará la conectividad, además, con la implementación de nuevos servicios de trenes suburbanos que enlazarán Quinta Normal y Batuco en un tramo de 27 kilómetros, y Santiago con Melipilla a través de Malloco a través de 61 kilómetros.
En la actualidad, Metro trabaja en las nuevas líneas 3 y 6, con lo que la rad total de servicio alcanzará los 140 km, con 136 estaciones. El plan contempla la inauguración de la línea 6 durante 2017 y de la línea 3 en 2018.